La naturaleza como gran aliado de tu salud y tu microbioma

La urbanización masiva ha producido cambios en varios aspectos de la vida de la población, los cuales impactan inevitablemente en la salud, generando menor exposición a la naturaleza y a los animales.  

La exposición a la naturaleza se ha relacionado con diversos efectos sobre la microbiota intestinal, especialmente en bebés y niños. Existen estudios que sugieren que el contacto con entornos naturales desde una edad temprana puede afectar la microbiota intestinal.  

Uno puntualmente realizado con niños en edad preescolar que participaban en actividades al aire libre encontró que dicha exposición podría influir en la microbiota intestinal. El estudio señaló que las actividades en entornos naturales ayudaron a mantener ciertas bacterias beneficiosas, como la Roseburia, que se asocia con la estabilización de los niveles de serotonina en el intestino.  

Esto indica que exponerse a la naturaleza no sólo afecta la microbiota intestinal, sino que también puede influir en vías fisiológicas relacionadas, como la producción de serotonina, que puede afectar el comportamiento. Además, pudieron observar una reducción del estrés percibido general, en especial en la frecuencia de la ira entre estos niños. 

Un muy buen momento para poder exponernos a la naturaleza de forma más habitual si uno vive en las grandes ciudades, es a través de la actividad física al aire libre.  

Más allá de los beneficios fisiológicos y psicológicos que ya conocemos que nos trae realizarla, al llevarla a cabo en espacios abiertos, entra en juego el aire exterior que tiene una mayor diversidad filogenética de comunidades bacterianas que el aire interior. Ya sea cualquier actividad al aire libre que pueda generar contacto con el suelo, los árboles y las plantas aumentarán las oportunidades de exposición a la diversidad microbiana.  

 

 

Si la actividad se lleva a cabo en entornos naturales, aumenta la probabilidad de inhalar fitoncidas naturales (compuestos químicos que emiten los árboles y otro tipo de vegetación) que están asociados con la reducción del estrés y beneficios del sistema inmunológico. Inclusive, se ha estudiado que aquellos deportistas que tienen contacto frecuente con césped natural, tierra y barro, tienen una mayor diversidad de microbiota intestinal en comparación con los controles.  

Por otro lado, se ha sugerido que una mayor exposición a las mascotas es una práctica beneficiosa para reducir el riesgo de enfermedades futuras al favorecer el desarrollo normal de la microbiota en los bebés. Por lo tanto, permitir que los bebés y los niños de la casa estén cerca de mascotas podría ser un paso para garantizar que su microbiota se desarrolle adecuadamente, lo cual es esencial para su sistema inmunológico y su salud en general.  

Ahora ya sabés que moverte al aire libre o hacer una escapada a la naturaleza pueden ser de gran ayuda para tu microbioma y tu salud. ¿Y qué tal sumar una mascota nueva a la familia? 

 

Referencias 

Sobko T, Liang S, Cheng WHG, Tun HM. Impact of outdoor nature-related activities on gut microbiota, fecal serotonin, and perceived stress in preschool children: the Play&Grow randomized controlled trial. Sci Rep. 2020 Dec 15;10(1):21993. doi: 10.1038/s41598-020-78642-2. PMID: 33319792; PMCID: PMC7738543.  

Logan AC, Katzman MA, Balanzá-Martínez V. Natural environments, ancestral diets, and microbial ecology: is there a modern “paleo-deficit disorder”? Part II. J Physiol Anthropol. 2015 Mar 10;34(1):9. doi: 10.1186/s40101-014-0040-4. PMID: 25889196; PMCID: PMC4353476. 

Ebrahimi S, Khatami S, Mesdaghi M. The Effect of COVID-19 Pandemic on the Infants’ Microbiota and the Probability of Development of Allergic and Autoimmune Diseases. Int Arch Allergy Immunol. 2022;183(4):435-442. doi: 10.1159/000520510. Epub 2021 Dec 3. PMID: 34864741; PMCID: PMC8805058.